MISCELÁNEA DE IDEAS

jueves, 15 de noviembre de 2012

Ubuntu: yo soy por que nosotros somos


Un antropólogo que estudiaba los hábitos y costumbres de una tribu en África quiso hacer algo divertido junto con los niños nativos. Consiguió una buena cantidad de caramelos y los puso en una canasta decorada con cinta y otros adornos, la cual dejó luego debajo de un árbol.

Llamó a los niños y les propuso un juego: que cuando él dijese “ahora”, ellos deberían correr hasta el árbol y el primero que llegase a la canasta sería el ganador, y tendría derecho a comerse todos los caramelos él solo.



Los niños fueron colocados en la línea de partida, esperando la señal acordada.

Cuando dijo “¡Ahora!”, inmediatamente todos los niños se tomaron de las manos y salieron corriendo juntos hacia la canasta. Llegaron juntos, y comenzaron a dividir los caramelos, y sentados en el suelo, los comieron felices.

El antropólogo fue a su encuentro y les preguntó por qué habían ido todos juntos, si sólo uno pudo haber tenido toda la canasta.

Entonces, los niños respondieron: “¡Ubuntu! ¿Cómo uno de nosotros podría ser feliz si todos los otros estuviesen tristes?”.